Rocío es una amiga artesana que conocí durante mi formación en la escuela Dionisio Ortiz de Córdoba. Ella toca todas las teclas: la ilustración, el textil, la bisutería, la joyería, los esmaltes,... Una de sus especialidades es elaborar flores de fieltro como tocado para el cabello. En muchísimos locales de Córdoba las comercializaba y a gran distancia era reconocida la mano de quién las elaboraba. Rocío llegó a recubrir la fachada de la Casa azul con estos bonitos motivos florales, todos únicos, todos diferentes.

Cuándo regresé a Manresa y encendí motores en mi taller, el empezar de la Fábrica de Tesoros, una de mis primeras piezas fue un regalito para Rocío, una de sus flores convertida en metal, con una piedra del empedrado cordobés y otra de Montserrat (la montaña que caracteriza mi actual horizonte). Una pieza que haría de enlace entre ella y yo, entre el allí y el aquí.

Más arriba, en la primera foto os muestro la Flor de Rocío. Una como los suyas de fieltro convertida en metal. Le sumé una piedra del empedrado cordobés y otra de Montserrat (la montaña que caracteriza mi actual horizonte), enlazando así el allá y el aquí. En las dos fotografías siguientes un par de conjuntos que salieron de rebote.

Más información i contacto con Rocío en su facebook.

La Fábrica de Tesoros de MeriTomasa está especializada en joyas personalizadas hechas a medida para todos los gustos y presupuestos: alianzas, diademas, pendientes, colgantes, broches, pulseras, anillos, tiaras… Mi propuesta de valor es crear productos donde seas tú quién decida la forma, los materiales, los acabados… Que puedas formar parte del proceso de fabricación y así empezar a llenar el objeto de algo más sensible que la fastuosidad que aporta el metal. Es un trabajo más íntimo, romántico, exclusivo y de calidad.

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